Intercambio por la AIESEC: ¿vale hacerlo?

¿Vale la pena un intercambio con AIESEC? ¿Es confiable? ¿Es una mentira? ¿O es una estafa? Hice 4 intercambios a través de esta organización – en India, Egipto, Serbia y Ucrania – y pasé por todos los altibajos que puede proporcionar una experiencia de intercambio. En este post, enumero puntos esenciales que debes considerar si estás pensando en viajar por AIESEC.

Como también trabajé en AIESEC como miembro del comité local de Florianópolis (Brasil) y fui parte del equipo de apoyo al comité de AIESEC en Mozambique, no tengo derecho a hablar mal de la institución. Siempre estaré agradecido por las experiencias, por las discusiones sobre el choque cultural y por conocer gente de todos los rincones del mundo, incluidos aquellos que se han convertido en mis amigos. Hoy, como ex miembro, no tengo conocimiento de la gestión y de lo que pasa en AIESEC, pero voy a destacar en este post la gestión de las expectativas que se generan tanto por los comités como por los interesados ​​en hacer un intercambio y los puntos a observar antes de tomar una decisión.

Hablando de expectativas cuando se viaja fuera de las rutas de turismo, como suele ser el caso en AIESEC, las experiencias de los viajeros, estudiantes de intercambio y cualquier otra persona que termina en estos lugares tienden a parecerse más a las divertidas descripciones de Chuck Thompson en los libros To Hellholes and Back: Bribes, Lies, and the Art of Extreme Tourism y Smile When You’re Lying que cualquier historia romántica sobre cómo cambiar el mundo. Estos 2 libros son indispensables para cualquier viajero que planee aventuras alrededor del mundo y profesionales del turismo.

Mirar más allá del costo financiero

En primer lugar, recomiendo mirar más allá del costo financiero si estás considerando viajar con AIESEC. Entiendo que estás buscando opciones de intercambio baratas y los precios de agencia tienden a ser altos para estudiantes con un presupuesto ajustado, también he estado en esta situación. El precio no es lo único aspecto en el caso de AIESEC, el intercambio puede funcionar o salir mal, hay muchas cosas en juego que están fuera de tu control e incluso del comité local que te recibe, aunque tengas toda la ayuda de miembros seriamente dedicados. . Ahorras el dinero que tanto te ha costado ganar, haces sorteos y gatitos, pides dinero prestado y … llegas al país de destino y descubres que el proyecto que solicitaste no existe. Te enoja solo con pensar, ¿verdad? En dos meses en la India, ya no podía contar cuántas personas vi en esta situación y el proyecto en el que trabajaría en Egipto también fue una estafa. El costo de vida en el país puede ser barato, el alojamiento puede estar incluido durante el proyecto o no, puede ser necesaria una visa más costos con burocracias, el vuelo puede ser costoso, entre otras cuestiones a tener en cuenta. Si no se tienes en cuenta todo esto antes del intercambio, puede resultar económico, pero con mucha frustración.

AIESEC es administrada por estudiantes

AIESEC es administrada por estudiantes que trabajan de manera voluntaria y no reciben nada por el tiempo dedicado a la organización, en todos los países donde está presente; excepto los miembros del comité nacional y del comité internacional que receben algo equivalente al salario de un practicante. Por lo tanto, no espere un servicio de agencia de viajes ni nada de eso. Hay miembros más y menos comprometidos, así como miembros ausentes. Hay comités de AIESEC mal gestionados, mientras que hay comités con una mejor gestión que muchas empresas. Hay países donde AIESEC funciona bien y hay países donde los comités solo cuentan el número de estudiantes de intercambio que llegan, hay proyectos fantasma, hay miembros que usan AIESEC para chamullar chicas extranjeras, especialmente en países donde el contacto entre hombres y mujeres es muy restringido . Y también hay estudiantes de intercambio que se exceden. Todo esto hay que tenerlo en cuenta.

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AIESEC no es una agencia de intercambios

El intercambio es probablemente el producto más conocido de AIESEC, sin embargo, la organización funciona como una plataforma para experiencias de liderazgo. Entiendo que quizás solo te interese hacer un intercambio, viajar barato o ir a un país en particular. Pero AIESEC no es solo un intercambio, no se limita a un comité local, es un movimiento global presente en unos 120 países, al menos. Como todo en este mundo, es cuestión de saber aprovechar las oportunidades que te rodean, desde conocer gente con intereses comunes en otros países hasta eventos interesantes.

El país a donde vas

La mayoría de los países donde opera AIESEC están fuera de las rutas tradicionales de intercambio: Estados Unidos, Canadá, Irlanda, Inglaterra, Australia y Nueva Zelanda; Sudáfrica es un destino exótico para las agencias. AIESEC sale totalmente del camino y para quienes están haciendo un intercambio por primera vez o tienen poca experiencia internacional, son intercambios en países del tercer mundo o subdesarrollados, como prefieres entender. Cabe destacar que un intercambio en países como India, Rusia o Colombia no tiene nada que ver con un work experience en E.E.U.U. o mochilar por la Europa Occidental.

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Aunque hay mucha más información disponible hoy que en mi época de intercambio, los países fuera de las rutas turísticas desafían incluso a las agencias de viajes acostumbradas a este tipo de itinerarios. Encontrar socios de confianza, regímenes de visados ​​confusos, leyes y burocracias estúpidas, cuestiones de seguridad y criminalidad, corrupción, cuidados y los choques culturales que en sí mismos ya dan mucho de qué hablar. La mayoría de los países del tercer mundo no son para unas vacaciones relajantes, excepto en complejos turísticos y zonas turísticas. Son destinos para quienes buscan aventuras y están abiertos a afrontar las molestias, ya sea por las circunstancias del país de destino o por diferencias culturales, y cualquier imprevisto que se ocurra en el camino.

¿Por qué este país? ¿Por qué este intercambio?

Para mí, estas son las preguntas más importantes que deben hacerse quienes quieren viajar por AIESEC. Fui a India y al resto de países donde hice mis intercambios (Egipto, Serbia y Ucrania) porque buscaba experiencias en países con circunstancias similares y peores que Brasil. ¿Por qué? Porque la mayoría de la población mundial vive en tales circunstancias y comprender las realidades de India, Europa del Este y el mundo árabe se casa con mi objetivo de trabajar en proyectos a escala global. Un título de Harvard no muestra a nadie cómo es realmente la vida fuera del primer mundo, ni los desafíos de lidiar con la corrupción, el crimen, la mala infraestructura, la inestabilidad política y económica, etc. ¿Y cuál es su razón para elegir un país en particular? Tener en cuenta las razones y planificar lo que vas a hacer en el país de destino es fundamental para disfrutar de tu intercambio de la mejor manera posible. No puedo recomendar la India para una chica del barrio fino que no puede ver polvo, por ejemplo, ni un país árabe para un chico afeminado.

Acceso a personas que han tenido experiencias similares

Uno de los mayores beneficios de AIESEC, si bien utilizado, es el contacto con personas que han tenido experiencias de intercambio similares a la tuya, así como los retos de adaptarse a la vieja rutina después del intercambio. Cualquiera que haya hecho un intercambio conoce el desafío de regresar al país de origen como otra persona después de una experiencia intensa, literalmente cambias y tus horizontes se expanden, y las personas que te rodean no entenderán tus dificultades para adaptarte a tu rutina anterior. Ah, ¡pero es un intercambio de 2 o 3 meses! Son experiencias breves, pero muy intensas. Dos o tres meses en países como India, Egipto y Kenia son mucho más intensos que dos años viviendo en un país como Suiza; lo que puedo confirmar por mi propia experiencia, tal vez publique otra publicación al respecto.

Espero darle una luz a cualquiera que esté planeando su intercambio. Los miembros de AIESEC, especialmente los vicepresidentes, pueden tener un ego inflado y llevar las metas más allá de lo que la organización realmente puede manejar. Muchas de las experiencias frustrantes que he visto y escuchado podrían haberse evitado si hubiera una conversación franca y una alineación de expectativas. Incluso para las agencias de viajes premium y las editoriales que publican guías de viaje de renombre mundial, organizar toda la logística para un país del tercer mundo es un gran desafío, por lo que una organización dirigida por estudiantes voluntarios, con una alta rotación de miembros, debe tener con los pies en la tierra sobre tus limitaciones.

Originally posted 2021-01-07 03:23:08.